Invierno gris
No hay nada que me deprima más que amanecer, abrir los ojos y ver el cielo triste y gris. Más allá del frío mortal que tengo que soportar durante todo el día, me frustra pensar en salir vestida como oso polar para poder sobrevivir. Aunque la mayoría de la gente considera más elegantes las colecciones de otoño-invierno, en lo personal, considero que es cero práctico salir a la calle envuelta con miles de capas. No sólo es incómodo, sino que, además, no es nada favorecedor. Entonces, díganme, ¿para qué sirve tomar litros de agua, hacer ejercicio y comer lechuga sin parar si de todas formas no podemos lucir nuestra figurita?
Saludos,

Antonieta


Fotografía: Luca Lazzari

1 comentarios:

Alejandra dijo...

Totalmente de acuerdo!!! Para que tanto esfuerzo si nos vamos a ver hechas bolita con tanta cosa encima!!!! AMO INFASHION!!

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